La mayoría de tu existencia es “racional”.
Tu toma de decisiones se fundamenta en “dejar enfriar”, analizar, sopesar, valorar y decidir.
Nada como cierta perspectiva para ver las cosas con menos ruido, más claras.
Digamos que todo se mueve si pudiésemos medirlo, entre el 3 y el 7.
Control.
La mayoría de tu otra existencia es “emocional”.
Te dejas inundar por sensaciones, te apasionas, tomas partido, creas desorden, te importan un bledo las consecuencias: ¡estás preparado para ello!
Descontrol.
Saber cómo y cuándo descontrolas , en un modo de control.
Sólo debes saber cuándo toca, cuándo se puede.
Son dos mayorías que coexisten, se entremezclan, ambas son imprescindibles, NECESARIAS, ambas te conforman y por tanto te definen.
Ambas son tú.
Nada que cambiar, si no ves motivo. Todo está ok.
Conocerse y aceptarse.
Ese es un gran valor.